Una investigación denuncia la compra de más de 51 inmuebles lujosos en efectivo por más de 2,7 millones de dólares.
Una denuncia a Jair Bolsonaro viene a poner una amenaza a su carrera por la reelección el próximo 2 de octubre. En el documento, se pide la investigación por lavado de dinero debido a la compra sospechosa de lujosos inmuebles en efectivo. «Tan sólo los políticos que están robando son capaces de construir un patrimonio de ese tamaño» dijo el denunciante.
Quien presentó la denuncia es Randolfe Rodrigues, portavoz en el Senado de la oposición a Bolsonaro y uno de los coordinadores de la campaña de Lula da Silva. Además, tiene experiencia en comisiones parlamentarias que investigan irregularidades en el Gobierno. Pidió a la Corte Suprema que interrogue al presidente y sus tres hijos que tienen cargo legislativo.
Flavio Bolsonaro es senador, Eduardo Bolsonaro diputado, y Carlos Bolsonaro es concejal de Río. Los tres estarían involucrados en la compra en efectivo de al menos 51 inmuebles entre 1990 y 2022. Para Rodrigues, la corte debería incautar los celulares y computadoras de los Bolsonaro para buscar pruebas de las transacciones.
Las transacciones sospechosas
Una investigación con acceso a las escrituras de compra de los inmuebles fue la base de la denuncia. Se analizaron 107 transacciones inmobiliarias realizadas por el presidente y toda su familia desde 1990. En la compra de 51 inmuebles fueron usados unos 2,7 millones de dólares en efectivo.
Si bien la práctica no es ilegal, los especialistas aseguran que es sospechoso ya que este tipo de transacciones son usuales para lavar dinero y ocultar recursos de procedencia ilegal.
Bolsonaro afirmó que no considera nada raro en la práctica y denunció que desde que asumió la presidencia él y su familia sufren una persecución de la prensa. «¿Cuál es el problema en comprar con dinero en efectivo algún inmueble?», preguntó el jefe de Estado.
